Que el inglés es una pieza clave de cualquier emprendimiento de negocios con alcance internacional ya lo sabe cualquiera, y que hoy día es casi absurdo descartar por completo la proyección internacional para cualquier actividad comercial también es cosa sabida. El inglés no está de más en cualquier trabajo, y si usted está en condiciones de agregar esta competencia a su currículum, ya se hallará aventajado con respecto a todas las otras personas que no posean un nivel de idioma tan bueno como el suyo.
Claro que aprender inglés es toda una inversión, como cualquier idioma. Requerirá tiempo y esfuerzo de su parte, cosas que usted muy probablemente ya entrega todos los días y en buena cantidad a sus distintas actividades, y encima de eso, deberá desembolsar una cantidad nada despreciable de dinero si realmente quiere tener un nivel competitivo de inglés. Claro que siempre podrá encontrar ofertas de un curso gratuito de inglés de negocios en Internet o alguna ONG, pero créame, lo que es de calidad, se cobra.
Como toda inversión, la decisión de aprender inglés debe ser calculada y tomada con sabiduría. Usted debe sopesar su presupuesto, sus posibilidades y su capital de interés. Es muy poco probable que una inversión para aprender inglés no dé buenos retornos, pero aún así debe asegurarse de elegir una buena escuela de inglés de negocios con buenos profesores y un sistema de horarios que se ajuste tanto a su propia rutina como a su ritmo óptimo de aprendizaje.
Ya conoce usted el dicho: no aspire a trabajar en un negocio, aspire a tener un negocio. Si usted tiene todas las herramientas necesarias para triunfar en el mundo contemporáneo, con la actividad en la que usted haya decidido participar, tarde o temprano debería reunir el capital y la experiencia como para llegar a la cima de un negocio, o bien, crear el suyo propio y ser su propio jefe.
El idioma inglés le permitirá expandir de manera exponencial sus posibilidades. Usted será capaz de apuntar a un público internacional y ofrecer sus productos o servicios más allá de las fronteras de su propio país. Además, podrá cerrar contratos comerciales con socios, proveedores y/o clientes corporativos de cualquier parte del mundo, y comunicarse de manera fluida con ellos gracias a la conectividad que nos ofrece la era digital.
Esté donde esté, usted debería tener a mano algún que otro curso de inglés de negocios, sobre todo si vive en una ciudad grande. Si posee el capital suficiente, asegúrese de inscribirse en un buen curso, y enlistarse en una escuela prestigiosa con métodos comprobados. Podrá hallar cursos ofrecidos por el British Council y otras instituciones reconocidas internacionalmente por su buen nivel de enseñanza y su nada despreciable peso en el currículum.
El propósito básico de aprender inglés con fines de negocios es interactuar con personas relevantes que provienen de otros países. Claro, no es la única ventaja cuando se trata de desarrollar su trabajo; el inglés le permitirá acceder a medios educativos, papers, cursos y diversas fuentes de información y formación que están en este idioma, pero el mayor uso que le dará será hablar con personas de otros países. Si este es el caso, entonces, ¿no es acaso una buena idea considerar la posibilidad de hacer una formación en el extranjero?
Escuelas de inglés en países de habla inglesa hay, y muchas. Sobre todo en sitios tales como el Reino Unido y los Estados Unidos, que reciben año a año miles y miles de visitantes extranjeros no angloparlantes que quieren profundizar sus estudios del idioma en el país en donde se habla, con una experiencia inmersiva y acceso a profesores nativos.
Si usted está interesado en aprender inglés de negocios, entonces no lo dude, y considere la posibilidad de hacer al menos parte de su formación en el extranjero. Busque los mejores destinos para estudiar inglés y elija su destino en función de sus intereses y del tipo de negocio que usted desee establecer. Si va al país con el que más le interesa trabajar en un futuro cercano, más herramientas conseguirá para conocer la cultura de dicho país y, por lo tanto, tener una relación más fluida y efectiva con clientes y proveedores de este ámbito.
Existen programas de intercambio de seis o doce meses, pero en el caso del inglés para negocios le resultará más conveniente encontrar un curso intensivo, donde en unas pocas semanas pueda incorporar y practicar los conocimientos relevantes para su actividad.
Learning English has never been easier and more fun!